Lo
prometido es deuda, hoy os traemos el secreto mejor guardado.
El botelo se
consume después de una larga cocción, dando como resultado un sabor
agradable y un poquito picante. Es un alimento contundente, apto para
personas con buen apetito y perfecto para calentar el cuerpo y el
espíritu en los meses de frío.
Seguramente
os preguntéis cómo hay que cocinarlo, y ya sabéis que para daros
la receta y los trucos pertinentes ya estamos nosotros. Serrín os
ayudará en todo lo necesario. Para empezar os daré un par de trucos
y unas nociones básicas.
Lo
primero que debéis tener en cuenta es que debéis disponer de
tiempo, porque, como os decía, requiere de una cocción larga y
pausada, sin prisas y sin que lo molestéis (con molestar nos
referimos a que es necesario que no se mueva demasiado ni se toque)
una vez dentro de la olla. Otra parte importante es que no se rompa
en ningún momento la piel del botelo, por eso es
aconsejable cocerlo envuelto en un paño de tela limpio o un saquito
como el de las legumbres; e incluso mejor en una bolsa de vacío para
que se conserven todos los jugos y podamos aprovecharlos después.
Vamos
allá con la receta:
-Ingredientes
(para 4 personas)
- 1 Botelo
- 1 Kg de patatas
- 2 manojos de grelos (también los podéis encargar en Serrín)
- Sal
-Elaboración
Se
introduce el botelo en una olla grande con abundante
agua fría, dentro de un saco de tela o envasado al vacío, de modo
que quede con 3-4 dedos de agua por encima del embutido. Es
importante que durante la cocción mantengamos la olla destapada en
todo momento. El cálculo de cocción será de 1 hora por kilo de
producto, siempre a fuego no demasiado fuerte.
En
otra olla pondremos los grelos limpios a cocer, metiéndolos en agua
con sal. Cuando comience a hervir pondremos bajaremos el fuego y lo
dejaremos cocer despacio. Cuando el grelo ya esté más blando,
introducimos las patatas limpias, dejándolos sobre 30 minutos
aproximadamente. Ahora todo es cuestión de ir comprobando la cocción
de las patatas (para que las patatas se cuezan por igual deben tener
aproximadamente el mismo tamaño) y los grelos para que no se nos
pasen.
Finalmente
sacamos los grelos y hacemos una cama muy hermosa en una bandeja.
Encima pondremos las patatas picadas en trozos grandes, y
el botelo en
el centro. No olvidéis que la mejor forma de presentarlo es hacerle
un corte en forma de cruz para que quede totalmente abierto y sea más
sencillo servirse. Si habéis cocinado el embutido en una bolsa al
vacío nuestro consejo es que aprovechéis el jugo que ha soltado
el botelo y
se lo echéis por encima a las patatas y los grelos.
¡¡
Y LISTO!! Ya tenéis la receta para hacer un plato sencillo y, por
supuesto, delicioso. Podréis encontrar todos los ingredientes en
cualquiera de nuestras dos tiendas, o encargárnoslos por teléfono o
correo electrónico. Para nosotros será un placer explicaros y
asesoraros sobe cómo cocinar vuestro botelo. Os
esperamos, serrin@s.
Recordad:
«Nunca choveu que non escampase»
(Nunca llovió que
no se despejara).
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